Nando Pons propone la continuidad de Manzano, pero Alemany condiciona el futuro del banquillo al de la propia entidad

Nando Pons ha sido siempre el principal valedor de Gregorio Manzano, y tiene claro que quiere seguir apostando por él. El director deportivo ya le ha dicho al propietario que la mejor opción para el banquillo del Mallorca la próxima temporada es la continuidad del técnico andaluz. Nando Pons propone su renovación y cree que existen opciones fundadas de conseguir retenerle, aunque por supuesto en base a un importante esfuerzo económico de ambas partes.
Mateu Alemany ha recibido la proposición de su director deportivo y ha escuchado sus razonamientos, pero de momento no ha tomado ninguna decisión ni parece que vaya a hacerlo en los próximos meses. Para el propietario la prioridad es vender el club este verano, y sabe que debe hacerlo libre de compromisos, porque puede que el próximo dueño prefiera a otro entrenador. Ahora mismo la continuidad de Manzano no es prioritaria, ni va a serlo hasta que se resuelva para bien o para mal el futuro institucional.
Eso no significa que Alemany no sea partidario de la renovación del entrenador. Está de acuerdo con Nando Pons en que su perfil es idóneo, pero no va a abordar el problema del banquillo hasta que no tenga asumido que él personalmente debe continuar al frente de la entidad, y eso como mínimo no se producirá hasta comienzos del verano siendo optimista.
Por supuesto Gregorio Manzano, que es consciente de la situación institucional, no va a esperar tanto tiempo. El entorno del entrenador ya le aconsejó a finales de la pasada temporada que rescindiera su contrato con el Mallorca, y ahora insiste en que es una etapa que ha tocado a su fin. Todo hace indicar que el año que viene le va a llegar una nueva oportunidad de dirigir a un equipo grande (Villarreal y Sevilla parecen los mejor colocados, y se habla también del Aston Villa inglés), pero también es cierto que el fútbol da muchas vueltas, y lo que hoy es blanco se convierte en gris en cuestión de horas.
Otro asunto de importancia capital es el económico. Si el Mallorca llega a Europa Manzano cobrará más de dos millones de euros en concepto de ficha y premios, y esa cantidad es absolutamente inasumible. Cualquier posibilidad de acuerdo futuro debería pasar obligatoriamente por una reducción drástica del salario del entrenador, y no parece que éste vaya a estar por la labor de aceptar esa condición.
Nando Pons, de todos modos, no pierde la esperanza, aunque sabe que el tiempo juega en su contra. La dirección deportiva, de momento, no ha hecho ni un solo movimiento para buscarle sustituto, aunque por supuesto sí que dispone de los informes necesarios por si llega el caso (y el que gusta mucho es Anquela, entrenador del sorprendente Alcorcón). Pero por ahora toca esperar y no va a pasar nada en los próximos meses, ni en un sentido ni en otro.